Si amas las atmósferas urbanas y el diseño audaz, ¡decorar en estilo industrial es definitivamente la mejor manera de crear una casa que refleje tu personalidad! Vivir en un loft neoyorquino es el sueño de todos, aunque no es para todos. Sin embargo, realmente se necesita muy poco para recrear en casa el encanto de este fantástico estilo.
Un poco de historia, en primer lugar: ¿cómo nació esta tendencia? El estilo industrial nace en los Estados Unidos en la primera mitad del siglo pasado con la idea de recuperar antiguos galpones y complejos industriales, para obtener talleres artísticos o para transformarlos en verdaderas viviendas.
Por lo tanto, decorar tu casa en estilo industrial significa sobre todo querer recrear estas atmósferas "regeneradas", ásperas y ricas en contrastes. Un estilo audaz, de carácter y creativo que requiere el respeto de pocas y simples reglas, para obtener un resultado sorprendente. Aquí hay algunas características que seguramente te convencerán de adoptarlo también en tu casa.
Es un estilo auténtico, sin demasiados adornos. Como se mencionó anteriormente, el mobiliario industrial deriva de la practicidad, y es precisamente esta característica la que lo hace tan atractivo para muchos. Es simple y no intenta ser algo más.
El mobiliario industrial es versátil. Siendo un estilo minimalista, se coordina muy bien con una variedad de otros elementos de decoración y es adecuado tanto para una casa rural como para un apartamento urbano. Por lo tanto, no está limitado a algunas habitaciones de la casa, pero es particularmente adecuado para cocinas, dormitorios, salas de estar y comedores. También es un estilo que se puede adaptar fácilmente según "cuán industrial" quieras que sea tu casa: algunos cojines y otros objetos decorativos, combinados con sillas industriales, podrán suavizar fácilmente las cosas, si no quieres que el aspecto sea demasiado austero.
Podríamos decir que es completamente ecológico. Los muebles industriales tienen aspectos ecológicos, ya que la madera y el metal utilizados para fabricarlos a menudo se recuperan. Además, en virtud de su naturaleza robusta, están construidos para durar en el tiempo y, por lo tanto, a diferencia de los muebles menos resistentes, es menos probable que terminen en un vertedero dentro de 10 años.
No importa si vuelcas algo. Por último, hay una ventaja no menor: si objetos como los muebles sufren golpes o rasguños ocasionales, como inevitablemente sucede, esto no hará más que agregar carácter a la pieza, en lugar de disminuirla, haciéndola única en su género. Un ejemplo son las mesas industriales de madera.
Recuerda algunos principios fundamentales de este estilo. No hay reglas rígidas, sin embargo, en esta lista hay algunos elementos clave a considerar:
- Es un estilo ecléctico: abrázalo, exprésate y asegúrate de combinar una variedad de elementos dentro de una habitación.
- Trata de mantener una paleta de colores neutros: beige, tortora, marfil, negro, gris y tonos de blanco para paredes, pisos y techos.
- Encuentra un equilibrio ponderado entre metal y madera.
- ¡La madera rústica y recuperada siempre funciona!
- Es un estilo robusto, por lo que los materiales, las fijaciones y los accesorios crudos y sin terminar van muy bien.
- Para respetar la interpretación más ortodoxa de este estilo, los ladrillos a la vista o las vigas del techo siempre son ganadores.
- Usa colores cálidos en objetos como alfombras y cojines, si buscas un aspecto industrial más ligero.